Un viejo conocido: cuál es la diferencia entre el fin del cepo de Macri y el de Milei

En la historia económica reciente de la Argentina, el “cepo cambiario” se ha convertido en una herramienta recurrente. En diciembre de 2015, Mauricio Macri asumió la presidencia prometiendo levantar el cepo heredado del kirchnerismo. Casi una década después, Javier Milei toma una medida similar. Sin embargo, el contexto, los objetivos y los resultados esperados son distintos.
Macri 2015: optimismo de mercado y un final anticipado
A los pocos días de asumir, el gobierno de Macri anunció el fin del cepo. El dólar oficial pasó de $9,8 a alrededor de $13,50 en una jornada, pero los mercados reaccionaron con optimismo. Las exportaciones se liberaron, los importadores recuperaron acceso al mercado y se levantaron restricciones para la compra de divisas.
La medida fue acompañada por un fuerte ingreso de capitales especulativos y endeudamiento externo, facilitado por una gran emisión de deuda soberana. Sin embargo, esa bonanza duró poco. La inflación no cedió, el déficit fiscal se mantuvo alto y el modelo de crecimiento por deuda comenzó a mostrar sus límites.
En 2018, la crisis cambiaria obligó al gobierno a pedir un préstamo de 44.000 millones de dólares al FMI, el mayor en la historia del organismo. El acuerdo incluía metas de déficit primario y reformas estructurales que nunca llegaron a concretarse. Para 2019, el dólar superaba los $60 y el cepo volvía en una versión más estricta.
Milei 2025: corrección forzada y anclaje en el ajuste
En diciembre de 2023, Javier Milei asume en un contexto completamente distinto: una inflación mensual superior al 25%, reservas negativas, cepo casi total y una economía al borde del colapso. A diferencia de Macri, Milei no inicia su gobierno levantando el cepo. Por el contrario, impulsa un duro ajuste fiscal, licuación del gasto y una devaluación inicial del 118%.
El gobierno logra superávit financiero, paraliza la emisión monetaria y congela la obra pública. Recién en abril de 2025, y tras sellar un nuevo acuerdo con el FMI, el gobierno anuncia el levantamiento del cepo cambiario, acompañado por un régimen de flotación controlada del dólar entre $1000 y $1400.
A diferencia del gradualismo de Macri, Milei opta por una estrategia de shock con un fuerte costo social pero con resultados en las variables nominales. La inflación cae por primera vez en marzo de 2025 a menos del 4% mensual y el BCRA deja de financiar al Tesoro.
Ambos presidentes buscaron salir del cepo como señal de confianza hacia el mercado. Pero mientras Macri lo hizo confiando en el ingreso de capitales y sin resolver desequilibrios de fondo, Milei esperó hasta corregir variables clave antes de abrir el mercado cambiario.
Macri finaliza su mandato con el regreso del cepo, una inflación de casi 55% anual y una deuda impagable. Milei, en cambio, enfrenta un escenario incierto, pero con herramientas estructurales en funcionamiento y metas fiscales cumplidas.
Levantar el cepo es una meta, no un punto de partida. Macri lo hizo con optimismo pero sin respaldo económico. Milei espera a contar con superávit y reservas. El tiempo dirá si la estrategia del ajuste primero y apertura después logra evitar los errores del pasado.