Vandalizaron la casa de Messi en Ibiza: activistas climáticos tiñeron de rojo y negro la fachada
Miembros del grupo Futuro Vegetal, que ya habían hecho una intervención en el Museo del Prado, grabaron el ataque a la propiedad del astro del fútbol.
Los activistas climáticos volvieron al ataque en Europa. Este martes, miembros del grupo Futuro Vegetal vandalizaron la casa de Lionel Messi en Ibiza con pintura roja y negra para llamar la atención sobre “la responsabilidad de los ricos en la crisis climática”.
Los militantes que se atribuyeron el hecho incluso divulgaron un video frente a la casa cerca de Cala Tarida, en la costa oeste de Ibiza, con una pancarta con la leyenda, en inglés, “Ayuda al planeta, comete un rico. Abolir la policía”. A continuación, se grabaron arrojando pintura roja y negra a la fachada blanca del inmueble.
El grupo dijo en un comunicado que quería evidenciar el papel “de los ricos en la crisis climática”, al atacar la mansión que aseguran es “una construcción ilegal”.
Futuro Vegetal citó un informe de Oxfam según el cual “el 1% más rico de la población mundial generó en 2019 la misma cantidad de emisiones de carbono que los dos tercios más pobres de la humanidad, pese a que son precisamente las comunidades más vulnerables quienes padecen las peores consecuencias de la crisis”.
Messi, actualmente del Inter Miami de la MLS, compró la propiedad en la isla del Mediterráneo en 2022 a un empresario suizo por unos 11 millones de euros (12 millones de dólares). La casa incluye un spa, un sauna y una sala de cine.
Medios españoles han reportado que la mansión carece de certificado de ocupación, el cual debe ser emitido por una agencia gubernamental para certificar que está en condiciones habitables, debido a que un ex dueño de la propiedad ejecutó obras sin permiso en el garage.
Futuro Vegetal, vinculado con grupos internacionales similares, ha efectuado decenas de protestas del mismo tipo, incluyendo una en 2022 en la que pegaron sus manos con goma a los marcos de pinturas del maestro español Francisco de Goya en el Museo del Prado, de Madrid.
El año pasado, activistas del grupo lanzaron pintura a un superyate en Ibiza que supuestamente pertenecía a Nancy Walton Laurie, la multimillonaria heredera del gigante comercial estadounidense Walmart.
La policía española dijo en enero que había detenido a 22 miembros de Futuro Vegetal, incluyendo a los dos que participaron en la protesta del Prado y a los tres principales dirigentes del grupo.
